BINARY ALGORITHMS: distorsión, disidencia y techno del futuro
Desde el corazón de Latinoamérica, Binary Algorithms no solo hace música: genera fricción, transforma patrones y propone nuevas formas de pensar el sonido. Como fundador del sello Furatena, ha construido una plataforma para artistas que se atreven a incomodar lo establecido. Su trabajo ha resonado en los radares más exigentes de la escena global —desde DJ Stingray 313 hasta Laurent Garnier—, y su presencia ha ocupado espacios como Deep Space Radio de Juan Atkins o Minimal Detroit de Terrence Dixon.
Dante Salas
6/25/2025


Disidencia sonora como confrontaciónal orden binario
Con una identidad profundamente marcada por la disidencia, Binary Algorithms combina el techno, el electro y el IDM con una narrativa que incomoda, reta y despierta. En esta entrevista para disidnt=, hablamos sobre su visión del arte, el poder de los espacios seguros, su historia musical y su compromiso con abrirle paso a nuevas voces en una industria que necesita urgentemente repensarse.
ENTREVISTA A BINARY ALGORITHMS
¿Cuál fue tu primer acercamiento con la música electrónica? ¿Cómo comenzó tu búsqueda sonora personal?
Lo tengo muy presente, la primera vez que tuve un pequeño contacto con la electrónica fue por una cinta de Trance Factory, curiosamente nunca pude escucharla porque no tenía como reproducirla y en alguna mudanza se tuvo que haber perdido, pero fue la primera vez que estuve en contacto con algo relacionado a este universo. Luego volví a conectar con el género gracias a algunas bandas de metal que escuchaba en mi adolescencia y que usan sintetizadores, internet hizo lo suyo y acabé inmerso en el house, disco, tech-house de antaño y posteriormente en el techno. A lo largo de mi vida he tenido muchas “pequeñas obsesiones” con muchos géneros y artistas, desde Michael Jackson, hasta Dr. Dre, Slipknot, Hans Zimmer, Dominick Fernow, Drexciya y Underground Resistance. Quiero creer que cada uno de ellos ha dejado una marca en mi y en mi sonido.
Furatena se ha consolidado como un sello que desafía las formas. ¿Cuál fue la visión detrás de su creación y cómo ha evolucionado?
Furatena surgió, en principio, de la necesidad de sacar mi propia música. Durante mi paso por la academia siempre me recalcaron que para ser “exitoso” debía sacar música en el sello de X o Y (generalmente artistas europeos), pero la verdad eso es algo que siempre me cuestioné, ese momento coincidió con que conocí al ahora extinto Insurgentes, el sello de Verraco, sin duda lo que ellos lograron nos marcó un sur, fue cómo una revelación o romper una barrera mental, esa que nos dice que el nivel más alto solo te lo pueden brindar o las discográficas europeas, o las dirigidas por algún artista ya posicionado proveniente del norte global. Hoy trabajamos con la certeza de que desde esta parte del mundo, aunque con algunas dificultades extra, también podemos llegar a esa excelencia sónica. El resto se ha dado de una manera muy orgánica, artistas ligados a nosotros como Saigg, Robert Cosmic, Zvrra o SVNDS, no son solo un resultado del “networking”, sino que con el tiempo se han vuelto amigxs, eso lo hace más lindo, que no sea solo un contrato o una firma.
En tu perfil te nombras como "disidente". ¿Qué significa para ti ser disidente hoy dentro del arte y la música?
Siempre estuvo muy ligado a lo que mencionaba antes, a de alguna manera, abandonar esos valores tan conservadores y eurocentristas del techno, y ser crítico al respecto. Hoy sigue siendo así, pero creo que a ello se le ha sumado el hacer todo esto desde una ciudad periférica y el que algunas personas tengan una percepción y un discurso tan dogmático sobre la latinidad. A veces parece que si eres latino tienes que, si o si, sonar tropical, o tienes que hacer “latin-club”, y si te gusta menos hay quienes te tachan, y dicen o escriben que no te sientes orgulloso de tus raíces, como si estuvieses alienado de tu origen. Nunca apoyaré que en un festival local todo el spotlight y garantías las tengan los artistas internacionales, pero tampoco me voy a adherir a esa falsa percepción que nos encasilla en un estereotipo y nos impone cómo debemos sonar.


El techno como fuerza colectiva y territorial
Como artista latinoamericano, ¿cómo ha sido abrirte paso en un circuito global que históricamente ha estado centrado en Europa o Estados Unidos?
Nunca es fácil, siempre es un reto porque por el simple hecho de nacer acá tenemos un par de obstáculos más. Si haces un tour por Europa o USA muy probablemente tengas que auto-gestionar todo, pagar tus propios vuelos y llegar allá “a ver qué sale”, nuestras divisas tampoco nos ayudan y si no tienes algún tipo de validación proveniente del norte, puede que incluso lograr hacerse un nombre a nivel local sea una tarea bastante compleja. Pero en medio de todo he encontrado, en Colombia y en otras latitudes, personas que creen en mí. Prefiero quedarme con eso.
¿Qué representa para ti estar frente a un público? ¿Qué sentís al conectar desde la cabina con quienes bailan tus sets?
Por alguna razón es una experiencia que solo puedo vivir un par de veces en el año, y la verdad es que es increíble cada vez que sucede porque, en consecuencia, se genera alguna expectativa al respecto, lo cual supone un desafío para mi. Algunos de los recuerdos más bellos que tengo son precisamente en esos instantes, amo a la gente que siempre ha estado ahí respaldando y apoyándome, ellos saben quienes son.
¿Hay alguna presentación, set o experiencia que recuerdes como un punto de quiebre o de reafirmación dentro de tu carrera?
No una sesión, pero si un release: los remixes de mi EP “Registers” de cierto modo me dieron esa consolidación luego del trabajo que veníamos haciendo. Fue un gran momento, me siento muy feliz y orgulloso al recordar que nombres tan históricos decidieron inyectarle su sonido a mis tracks, haberlo conseguido desde Furatena también me hace sentir muy honrado. Pero, me es inevitable pensar, cuestionarme y sentir que hasta ese momento mi proyecto y música no tenían tanta relevancia. Aunque soy consciente del logro que significan esas remezclas, a veces la industria las percibe como si se tratase de una estampilla de calidad, una que da fe de que algo es bueno.
Desde tu lugar como productor, ¿cuáles son los sonidos o herramientas que más disfrutas explorar últimamente?
ASM Hydrasynth y Pigments 6.


Visibilidad, cuidado y protección en la pista
¿Qué referentes han marcado tu camino? ¿Hay artistas, movimientos o ideas que te hayan influenciado de forma decisiva?
El manifiesto de Underground Resistance y el mito de Drexciya marcaron un antes y un después en la forma en la que percibo a todo este ecosistema que, últimamente, se siente más como una industria. El enfoque de Mark Fisher sobre la hauntología también me ha ayudado a entender y abordar el dub–techno desde una perspectiva un poco más filosófica.
En disidnt= hablamos de la importancia de los espacios seguros. ¿Qué significa para ti construir o habitar uno dentro de la música electrónica?
Es lo más necesario e importante, no hay nada más lindo, tanto para los artistas como para los asistentes, que sentirse a salvo en la pista de baile y esa sensación de “camaradería” que se da entre los distintos actores que hacen parte de ese momento, es algo inigualable. Creo que un espacio seguro se logra entre aquellas personas que habitan ese espacio y quienes lo dirigen. Los clubes, al ser el motor de todo este movimiento, tienen el poder y la influencia para crear comunidades que sean seguras, lo que pase allí se verá reflejado en los festivales y raves. Quienes gestionan estos puntos tienen una gran responsabilidad, entender que un club es un pequeño lugar que, se supone, debería estar abierto a la experimentación sónica y al intercambio de ideas, y que es un nido en el cual nacen y se desarrollan comunidades y nichos.
¿Qué opinas sobre la creciente presencia de mujeres y personas disidentes en los line ups? ¿Estamos avanzando en representación o aún hay mucho que hacer?
Estoy seguro de que han habido muchos avances en esto, cada vez hay más representación femenina y de la comunidad LGTBIQ+ en carteles de festivales y clubes. También hay cada vez más artistas representando a estas minorías, lo cual es bueno porque asimismo se genera una amalgama enorme de posibilidades para los promotores, pero también creo que hay mucho trabajo por delante, aún no logramos line-ups verdaderamente equitativos. Por otro lado, creo que —disidencias— también son aquellas personas que habitan las periferias y los suburbios. Hoy, ser artista es un lujo, ¿Cuántos DJs y productores se quedan en la clandestinidad o “underground” porque no pueden vivir en una capital? ¿Cuántos artistas nunca acaban de emerger porque no pudieron hacer parte de un cierto contexto y no tuvieron acceso a una red de contactos?
Como curador de un sello, ¿Qué buscas en un artista o track cuando decides apostar por una nueva propuesta?
Procuro sellar artistas latinoamericanos, pero al final lo único que importa es lo que suena a través de los monitores de mi estudio.
¿Qué consejo le darías al talento emergente que quiere entrar a esta industria sin sacrificar su identidad ni su visión?
Que tengan aguante y crean en su enfoque porque es la única forma en la cual pueden transmitir su realidad.


Binary Algorithms no sigue fórmulas: las reescribe. Su trabajo como productor, curador y artista es un ejemplo de cómo el techno no solo puede sonar fuerte, sino también ser una herramienta de transformación y dislocación. En una escena muchas veces anestesiada por lo repetitivo, su propuesta insiste en el error, en el desvío, en lo no lineal.
Desde disidnt=, celebramos su valentía para crear sin concesiones, su apuesta por la comunidad artística del sur global y su firme decisión de que el futuro —aunque incómodo— también puede ser profundamente bello si lo distorsionamos a nuestra manera.